El euskera está revitalizándose. Todavía tiene mucho camino por recorrer, pero el conocimiento ha ido creciendo de forma constante en las últimas décadas. En Navarra, el euskera tiene cada vez más hablantes, siendo ese incremento más evidente entre las generaciones más jóvenes. Generalmente las personas que saben euskera se lo transmiten a sus hijas e hijos, y así sucesivamente. Pero esa no es la única vía. Son muchos los niños y niñas que aprenden euskera en el colegio. De hecho, la extensión del conocimiento de euskera se debe en gran medida al modelo D (modelo de inmersión en euskera). Muchas familias, sabiendo o no euskera, eligen la educación en euskera para sus hijas e hijos.
Hay quien siempre lo ha tenido claro, pero también hay casos que echan en falta alguna información, tener a quién preguntar por su experiencia, aclarar dudas… Dudas que van cambiando en el tiempo o que varían de una familia a otra. Hace más de cinco décadas, por ejemplo, al ponerse en marcha las primeras escuelas e ikastolas, las familias en las que se hablaba euskera se preguntaban si sus hijas e hijos aprenderían bien castellano. No tardaron en comprobar que al estudiar en euskera, también aprenden castellano sin problemas.
De igual manera, cuando el aprendizaje se extendió a zonas en las que el uso del euskera era menor, o cuando familias en las que no hablaban euskera comenzaron a matricular a sus hijas e hijos en ese idioma, éstas se preguntaban cómo ayudarles con las tareas escolares. Al partir de una situación diferente sus dudas también lo eran. Familias que han llegado a Navarra desde otras comunidades autónomas u otros países también se han visto en esa tesitura, pero al fin y al cabo, el modelo D es un modelo que acoge con los brazos abiertos a todas y todos los niños, independientemente de si las familias hablan o no euskera. Acoge a las niñas y niños con el propósito y la ilusión de que, al tiempo que adquieren los conocimientos escolares, aprendan euskera. Y asimismo, poner en valor y compartir el resto de idiomas y culturas de las familias del colegio.
Es un modelo que acumula años de experiencia, que funciona, donde aparte de euskera, también aprenden castellano e inglés. Y muchas familias pueden contar su experiencia y ayudar a las demás a aclarar sus dudas, a entender cómo funciona la inmersión…
Sobre su experiencia han hablado, por ejemplo, Cecilia, Umelfadli, Ernest y Mahfuda o personas como Falou, Hugo, Graciabel o Pamela.
Así mismo, era.eus ofrece respuestas en diferentes idiomas a las preguntas más frecuentes que suelen surgir sobre el modelo D:
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